viernes, 18 de diciembre de 2009

Platicando


Paso un tiempo, antes de que volviera a salir con nadie, me limité a seguir bailando, teníamos un coreógrafo que nos montaba los bailes el también bailaba, era guey y me quería mucho, me cuidaba mucho y no le gustaba que saliera, con hombres, "siempre me decía mami, tu eres demasiado linda para pudrirte en este mundo maldito" " puedes casarte con quien quiera, mira como se le cae la baba a todos por ti, eres la chica preferida, ¿lo sabias?- sí pero no sé que hacer?

El me esperaba todas las noches para acompañarme, y así evitar que me fuera con nadie. Muchas de mis compañeras salían y los clientes se preguntaban porque yo no? pero respetaban mi desicion.
Un día vino a buscarme, o mas bien me mando a buscar con un mesero un tipo, alto, elegante bien vestido, muy guapo, tenia pelo negro tipo chino, me gusto de inmediato y salí con él, el era extranjero, no recuerdo de donde. Era casado, con una mujer del país y más que sexo lo que buscaba era con quien desahogarse, tenia muchos problemas de entendimiento con su esposa, (choque de culturas) siempre se quejaba de que hacia regalos costosos a su esposa que después llevaba un familiar de ella, por ejemplo: me contó que le había regalado una pulsera de oro y que después vio a la hermana de ella con la pulsera. (el no entendía que nosotros somos así, que el hecho de que su hermana usara su pulsera, no quería decir que ella no apreciara el regalo, es solo una forma de que su hermana también disfrute de lo que ella tiene, es muy común aquí) se lo hice entender de este modo y se quedo mas tranquilo, se convirtió en mi cliente de los martes, pagaba muy bien, aunque no era terrible en la cama. Aunque el no estaba ahí para haceerme sentir bien a mi.

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